TIJUANA, ENERO 5, 2021.-Luego de concluir un curso en el que se les enseñó a prevenir actos de violencia intrafamiliar, así como a crear su propio negocio con la aplicación de uñas acrílicas, 70 mujeres de las colonias Urbi Villa del Prado y Villa del Campo, acordaron ser multiplicadoras del programa “Mujeres construyendo la Paz”.
Estas acciones fueron organizadas por la Dirección de Prevención del Delito y Participación Ciudadana de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana Municipal (SSCPM), que dirige Eduardo Goris Tamayo, con el Programa de Fortalecimiento para la Seguridad (FORTASEG).
Las participantes fueron instruidas para defenderse de situaciones de violencia y en habilidades para el trabajo, lo que les permitirá en el corto plazo generar sus propios recursos y, con ello, obtener ingresos económicos para salir adelante junto con sus hijos.
“A nosotras nos ha venido a beneficiar bastante, muchas de las veces nos hemos quedado sin trabajo por la edad y porque algunas tenemos varios hijos; mediante estos cursos hemos aprendido un oficio y ya sabemos detectar situaciones de violencia”, indicó Verónica Soledad Martínez Chico, residente de la colonia Urbi Villa del Prado, Segunda Sección.
Por su parte María del Carmen Trujillo Baylón, destacó que este programa implementado por la Dirección de Prevención del Delito de la SSCPM ha sido un gran acierto, ya que ha podido aprender mucho en torno a la violencia intrafamiliar, así como a instruirse en un oficio.
“Me invitaron y yo estoy contenta con este programa. En diferentes talleres nos han hablado de la violencia de género, muchas veces en nuestras casas somos víctimas y no sabemos hasta dónde decir alto y aquí nos enseñaron a cómo evitar estas situaciones; el estar en Mujeres Constructoras de Paz nos ayuda de muchas maneras y nos abre la puerta para que mejore nuestra economía”, expresó.
En tanto, María Félix Hernández García, otra de las beneficiadas de este programa, mencionó que el haber aprendido técnicas para poner uñas le permitirá poner su propio negocio al igual que a las demás que tomaron este curso, ya que al ser su propio jefe podrá estar más al pendiente de sus hijos, lo que le dará mayor tranquilidad al estar en una colonia con alto índice de violencia.
Finalmente, estas féminas quienes reciben los beneficios del programa nacional de Prevención de Violencia Familiar y de Género, de la Secretaría de Gobernación, acordaron ser multiplicadoras para ayudar a otras mujeres a salir de la situación de violencia en la que se encuentran.
