TIJUANA, SEPTIEMBRE 2, 2023.- Con el objetivo de conocer las necesidades que pudieran tener, la alcaldesa Montserrat Caballero Ramírez visitó el comedor comunitario J. Guillermo Ruiz Hernández, espacio donde de lunes a viernes son atendidos aproximadamente 100 menores en edad escolar.
Durante su visita, la primera edil ofreció el apoyo necesario para que el proyecto continúe dando atención a los niños y adolescentes tijuanenses, siendo este sector uno de los prioritarios para el Gobierno que dirige.
Caballero Ramírez realizó un recorrido para conocer el lugar donde se imparten clases de preparatoria a jóvenes provenientes de colonias prioritarias, que además permanecen en el espacio que cuenta con dormitorios, funcionando como un internado, razón por la cual, tienen la posibilidad de terminar su bachillerato en 2 años.
“El concepto es muy sencillo de entender, no es una preparatoria más en una colonia de la ciudad, es una escuela donde se recepcionan y atienden a jóvenes provenientes de colonias con problemáticas sociales”, señaló la alcaldesa.
En su visita al comedor, que también funge como estancia para los menores, Caballero Ramírez saludó a los jóvenes estudiantes de preparatoria, además dio cuenta de las distintas oportunidades que tienen de practicar algún deporte o tocar un instrumento musical, a través de las becas que el XXIV Ayuntamiento que encabeza, pone a su disposición.
Por ello y como muestra de su compromiso con las niñas, niños y adolescentes tijuanenses, la munícipe ofreció el apoyo de su Gobierno, a este comedor comunitario, para que se cumpla con el principal objetivo, brindarles un lugar donde lo primordial sea su atención, seguridad, y cuidado, para lograr el desarrollo pleno de los menores.
El comedor fundado por el licenciado Guillermo Ruiz Hernández, con apoyo de la señora María Elena Saucedo, coordinadora de colonias populares, es atendido por hijas y nietas de quien en vida fuera una lideresa social.
Las niñas y niños provenientes de aproximadamente 44 colonias, son llevados al comedor por sus padres todas las mañanas, donde desayunan para después ser trasladados a las escuelas cercanas en la colonia Miramar, por el personal que labora en la institución.
