TIJUANA, FEBRERO 8, 2024.-Durante la sesión plenaria de este jueves, las y los integrantes de los diferentes grupos legislativos de la Cámara de Senadores votaron en forma unánime para aprobar dictámenes relativos a distintas iniciativas en materia de maltrato y abuso sexual infantil; como en torno de la ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado.
Con la asistencia votación del senador de la Fracción Parlamentaria del Partido del Trabajo, Jaime Bonilla Valdez, el Senado de la República concedió su aval sin votos en contra ni con abstenciones, a las propuestas para reformar diversas disposciones penales y legales de carácter generalizado.
Se expuso que cada año, más de 4 millones y medio de niñas y niños son víctimas de abuso sexual en México, lo cual hace que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) lo coloque en el primer lugar mundial en este delito.
De acuerdo con el Colectivo contra el Maltrato y Abuso Sexual Infantil, esta cifra es poco realista porque sólo es denunciado uno de cada 100 casos de abuso sexual infantil: «Estas cifras hablan del grave problema que estamos viviendo a escala nacional.
El abuso sexual hacía niñas, niños y adolescentes se efectúa cuando una persona de la misma o mayor edad los obliga a tener contacto sexual a través de caricias, besos, tocamientos; ver y escuchar pornografía o exhibir los genitales y/o cualquier comportamiento de tipo sexual.
La violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes es una de las agresiones más severas contra su integridad física, psicológica y emocional; cuando este se manifiesta, afecta de forma significativa y vulnera a una serie de derechos universales que están interconectados entre los que destacan: el derecho a la paz, a la educación, a la protección de la salud, a la seguridad social y por supuesto a una vida libre de violencia.
En su informe mundial sobre la Violencia y la Salud, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) anotan que millones de personas en especial niños, niñas y adolescentes en condición de vulnerabilidad, padecen malestares y cambios en su conducta física, emocional y del estado de ánimo.
