TIJUANA, MAYO 5, 2022/DTJ.- No queremos condolencias, no queremos la misma frase de siempre de llegar a las últimas consecuencias, no queremos el uso político del caso, ni mucho menos queremos lástima nacional. Lo que queremos en México es protección a quienes ejercemos este oficio de las letras, para los verdaderos periodistas y sus familias que hoy estamos de luto con la muerte de un verdadero periodista, Luis Enrique Ramírez Ramos.
Su cuerpo apareció envuelto en plástico y la autopsia reveló tortura, antes de morir a consecuencia de un traumatismo craneoencefálico.
Columnista de «El Debate«, su nombre incendió las redes cuando esta mañana de jueves se publicaron imágenes en vivo de un camino vecinal al que llegaron elementos de la Fiscalía Estatal de Sinaloa porque el cadáver del comunicador había sido localizado.
La Fiscal de Sinaloa, Sara Bruna Quiñónez Estrada confirmó la noticia luego el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya lamentó el crimen y expresó sus condolencias y solidaridad así como el compromiso para esclarecer el crimen.
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Cabe mencionar que el comunicador sabía que estaba amenazado de muerte a tal extremo que llegó a confiar a un compañero de la prensa: «yo soy el que sigue«. Nadie logró protegerlo. Una vez más la brutalidad triunfó por encima de libertad de expresión y el periodismo perdió un soldado más.
Luis Enrique Ramírez Ramos fundó el portal de noticias Fuentes Fidedignas, donde hasta este día era el Director General. Es reconocido a nivel nacional por haber sido columnista de El Debate, otros medios como La Jornada, el diario nacional El Universal, el medio televisivo Milenio e incluso Reforma, dentro de su larga trayectoria por los medios de comunicación de este país.
Sus amigos entrañables como Barbara Obeso, periodista aguerrida esto publicaron luego de conocer el crimen:
Artículo 19 exigió el esclarecimiento del caso y garantizar la investigación pronta, imparcial y diligente «a través de la aplicación del Protocolo Homologado para investigar delitos cometidos contra la libertad de expresión».
“También hizo un llamado al Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, de la Secretaría de Gobernación, para coordinarse con las autoridades correspondientes para proteger a la familia y personas colaboradoras cercanas al periodista.
El periodista, quien se encontraba privado de su libertad desde la noche del miércoles -de acuerdo con su amiga, la política Sinaloense María Inés Pérez Corral- El compañero Luis Enrique Ramírez fue un perseguido político hace años, se tuvo que ir de Culiacán por que estaba en riesgo su vida y volvió con el tiempo ya que se sintió seguro, volvió y fundó algunos puntos de encuentro a donde lo seguí, uno de ellos fue en la báscula, volvió porque le hacíamos falta y en Sinaloa hacia falta su voz, después se reincorporó al Debate, como dije, un hombre bondadoso y protector de animales además de periodista.
