TIJUANA, ENERO 11,2024.-Las malas prácticas en la disposición de los residuos sólidos y líquidos son un factor relevante para que las tuberías se vean obstruidas y dañadas, causando así cortes constantes en el suministro de agua, por ello el futuro hidráulico de Baja California es una tarea que cae en manos de sociedad y gobierno.
Así lo indicó la Lic. Marisol Montaño, fundadora y presidenta de la asociación civil Hagamos Conciencia, quien resaltó que Baja California es una entidad federativa pobre en recursos hídricos debido a su clima, así como de la escasez de las aguas meteóricas en gran parte de sus regiones, lo que genera que la mayoría de los arroyos y ríos bajacalifornianos no existan como tal, más que durante breves periodos de ciertos años.
La activista pro ambiental recordó que el estado cuenta con la mayor parte de uno de los distritos de riego más importantes del país, siendo éste el Río Colorado, el cual cuenta con unos 2,650 millones de metros cúbicos anuales, pero que desde hace ya unos años no da abasto suficiente para el crecimiento poblacional.
“La administración de este vital líquido, para hacerlo llegar todos los días a los hogares, comercios y vías públicas, es muy importante, sin embargo, un papel muy importante es el de nosotros como ciudadanos, ya que una sola persona que arroje residuos a la calle o al alcantarillado puede dejar sin agua a un gran número de familias”, comentó Montaño.
En ese sentido, la presidenta de Hagamos Conciencia explicó que las principales razones por las que un sistema pluvial en el sector habitacional puede llegar a verse afectado es el arrojo al desagüe de residuos orgánicos, papel higiénico, grasas y aceite para cocina, lo se suma a los desechos de otros sectores como el industrial.
Por su parte, el Catedrático del Instituto Tecnológico de Tijuana (ITT), Ing. Jorge Alberto Muñoz Escudero, destacó que los trabajos que realizan autoridades como la Comisión Estatal de Servicios Públicos (CESPT) son positivas, pero no son suficientes ante el crecimiento constante de la ciudad.
“El trabajo nunca será suficiente, sin embargo existen las dependencias, la planeación que tenemos que hacer conjuntamente los colegios, academias, maestros, alumnos, ingenieros, el Ayuntamiento, Gobierno Federal, Estatal, todos tenemos que participar en esa encomienda y reto”, señaló.
En su opinión, el Ing. Manuel Becerra Lizardi, miembro del Consejo Mundial del Agua y de la Asociación Mexicana de Hidráulica, recordó que Baja California se encuentra en una de las zonas desérticas y de estrés hídrico más altas del mundo.
El experto añadió que una desaladora es una de las opciones para el incremento en la oferta del agua de la zona costa de Baja California.
“Estos proyectos no son cosas novedosas; de 1970 a 1985 Tijuana recibió agua de una planta desaladora con tecnología mexicana y fue una solución en aquel tiempo mientras se construía el acueducto del Río Colorado”, afirmó.
Añadió que el reuso de las aguas negras es posible, pues existe la tecnología y la sociedad lo demanda, en tanto que el medio ambiente lo va agradecer, ya que el agua es un recurso demasiado valioso para utilizarlo una sola vez.
Finalmente, tanto los ingenieros como la presidenta de Hagamos Conciencia, Marisol Montaño, hicieron un llamado a las autoridades a trabajar de forma conjunta en un tema importante que podría dejar un legado, pues se podría dar solución a un conflicto que podría venir retrasándose por distintas circunstancias.
