
Trump pausó los aranceles porque hay reclamos de la industria automotriz. Pero hay letras chiquitas. Va lo importante:
Los aranceles quedan suspendidos un mes para tres empresas que cumplen con el T-MEC: Ford, General Motors y Stellantis (que fabrica Jeep, Peugeot, Chrysler, entre otras).
Y subieron como la espuma: las acciones de Ford subieron cinco puntotes, GM siete puntos y Stellantis nueve. Ahorita deben seguir destapando botellas de champán.
Otros fabricantes podrían tener 0 aranceles, siempre y cuando cumplan con las reglas del tratado de libre comercio (que cierto porcentaje de piezas hayan sido fabricadas en América del Norte).
Pero cuidado: Trump dijo que esto no quiere decir que ya no haya aranceles. Según él, el mes es un periodo de gracia para que empiecen a mover fábricas a Estados Unidos.
Y al peso le salieron músculos: subió 1% solo por la noticia.
Pero los engranes siguen: más de 200 maquilas de Tijuana que están en los negocios de insumos médicos, semiconductores y componentes electrónicos, dicen que se reorientarán al mercado interno.
Y spoiler: Sheinbaum ya dijo que México se pondrá en modo pro para conseguir otros socios comerciales, más allá de América del Norte.
En perspectiva: parece que los aranceles del 25% es la nueva realidad. Es un problemón porque el PIB de México se reduciría un 3.5%, según Goldman Sachs.
Ahora más que nunca será trascendental el próximo domingo, el día en que Sheinbaum anuncie el nuevo rumbo económico de México.
EXPRESSO MATUTINO