TIJUANA, JUNIO 24, 2024.-Consejo Estatal Vida y Familia, en representación de los movimientos y asociaciones provida de Baja California, expresa su profunda preocupación y enérgica oposición a la reciente aprobación de la reforma al Código Civil por parte del Congreso del Estado, que permite a menores de edad cambiar su identidad de género en sus actas de nacimiento sin el onsentimiento de sus padres. Esta medida representa un ataque directo a la autoridad y derechos de los padres, con consecuencias muy graves que afectan a la niñez.
La decisión de permitir que los menores modifiquen su identidad de género sin la participación de sus tutores legales, es una afrenta a la paternidad y a la unidad familiar.
CONEVIF B.C., advierte que esta reforma no solo socava la estructura familiar, sino que también sienta un peligroso precedente en la educación y el bienestar de los menores, al privar a los padres de su rol fundamental en decisiones críticas de sus hijos, se abre la puerta a consecuencias irreversibles para la salud y el desarrollo psicológico de los niños.
Aunado a esto, hay un grave riesgo para la identidad y seguridad de los menores, ya que esta reforma permitirá actos de simulación jurídica, falsificación de documentos, suplantación de identidad, hasta incluso facilitar el tráfico y la trata de menores, o la sustracción de los hijos en caso de divorcio por parte de uno de los progenitores, al cambiarles su sexo en actas para que sean irrastreables.
Este tipo de reformas se han implementado sin un verdadero proceso de consulta y sin la inclusión de voces expertas en la materia. Estamos viendo una agenda que parece estar orientada a la desestabilización de la familia y a la promoción de intereses que no favorecen el bienestar de los menores. También señalamos que esta reforma es parte de una serie de cambios legislativos que, en su opinión, buscan despojar a los padres de su autoridad y control sobre la crianza de sus hijos. Hemos sido testigos de la legalización del aborto y el matrimonio igualitario sin una adecuada consulta pública, y ahora vemos cómo el Congreso continúa avanzando en esta dirección.
Estamos preocupados por el futuro de nuestros hijos y por la imposición de una agenda que no refleja los valores de nuestra comunidad. ¿Qué vendrá después? ¿La legalización de la hormonización y mutilación de los menores? Además, cuestionamos los motivos detrás de estas reformas, sugiriendo que podrían estar influenciadas por intereses externos y potencialmente peligrosos. Nos preocupa que estas decisiones estén siendo impulsadas por intereses (económicos) de mercado o, peor aún, por individuos que buscan normalizar conductas inapropiadas, por ejemplo, el movimiento activista pedófilo MAP (Personas Atraídas por Menores), que está pidiendo se reconozca el 24 de junio como el día del orgullo pedófilo.
En el ámbito educativo, tememos que estas reformas obliguen a las escuelas tanto privadas como públicas a adoptar políticas que no reflejan los valores de la comunidad y que podrían tener un impacto negativo en el desarrollo de los estudiantes. Las instituciones educativas deben ser espacios de formación y no meros instrumentos para la implementación de políticas estatales que no cuentan con el apoyo de los padres y la sociedad en general, además del reto de adaptar el reglamento desde el preescolar, ya que se enfrentarán a situaciones como: el uniforme escolar que portarán, la participación en competencias deportivas, festivales escolares y sobre todo, un punto que también incluye un tema de seguridad, el uso de sanitarios o regaderas. Niños que se identifiquen como niñas, entrando al baño de niñas y viceversa. Este último punto también es de considerarse en espacios públicos como cines, parques, centros comerciales, etc.
Es de gran relevancia considerar el impacto emocional que estos cambios conllevan en la dinámica social, provocando en los menores, confusión y poniendo en peligro su salud integral.
Actualmente un menor de edad requiere la orientación y autorización de sus padres para la toma de decisiones, pero en cuestión de orientación sexual el Congreso del Estado está limitando y obligando a los padres a no interferir.
¿No les parece sospechoso? Hacemos un llamado a la ciudadanía, a escuelas, a maestros, a empresarios, a toda sociedad a unirse en la defensa de los derechos de los padres y el bienestar de los menores. No permitiremos que el Congreso continúe con esta agenda sin una verdadera consulta y sin considerar las graves implicaciones de estas reformas.
Pedimos el veto de la Gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, en sus manos esta detener esta ley aberrante.