CDMX, MAYO 3, 2021.- La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC)
Este 1ero. de mayo, la conmemoración del Día Internacional del Trabajo se vio marcada por la pandemia, millones de personas en el mundo perdieron sus fuentes de empleo, engrosando las filas del desempleo o de los “parados”. En México, cerca de 40 millones de personas trabajan en la informalidad.
«El segmento poblacional que más resintió este flagelo fueron las mujeres con hijos, ya que se vieron obligadas a abandonar sus empleos para apoyar a sus hijos en casa en sus labores escolares, a sus enfermos que no lograron o quisieron hospitalizarse, a sus adultos mayores cuidándolos del contagio y al de la familia que con precaución y temor se la tuvieron que rifar y salir a la calle en busca del sustento. Las amas de casa han sido el dique resiliente de los hogares mexicanos, en ellas recayó toda la carga del peso de la pandemia», comentó Cuauhtémoc Rivera, presidente de ANPEC.
El desempleo se extendió debido a los efectos de la recesión económica que provoco la caída del consumo y del circulante en el mercado. Muchos pequeños, medianos y grandes negocios se vieron orillados a cerrar sus puertas y despedir a sus trabajadores; en México se perdieron más de 2 millones de empleos formales por covid, la oferta laboral se precarizó, ofreciendo raquíticos salarios que los trabajadores tuvieron que aceptar por no llegar con las manos vacías a sus casas.
La economía informal del país también vio afectados sus flujos en el año covid; el “quédate en casa” prácticamente paralizó el mercado. Los desempleados se desbocaron a la informalidad, con mucha creatividad comenzaron a ofrecer un sinnúmero de productos y servicios nuevos buscando algún tipo de ingreso: a través de las redes, por catálogo, de garaje, bazares, rifas, tandas, muchas de las formas con las que la gente saturó el mercado desde la informalidad.
Poco impacto tuvo el aumento al salario mínimo que decretó el gobierno federal, ya que a todas luces fue un aumento cosmético y artificial que no derivo de un clima de reactivación económica.
Aunado a todo esto, cada vez son más los reclamos de nuestros socios comerciales EU y Canadá al señalar incumplimientos del gobierno mexicano al TMEC.
La reactivación económica de Norteamérica va en marcha impulsada por el gobierno de Joe Biden, se deja ver venir un tsunami de oportunidades para el desarrollo, estamos emplazados a aprovecharla, estar en posición de participar y sacar la mejor ventaja posible de este tirón económico no visto desde la gran depresión del siglo pasado. Hay mucha confusión e incertidumbre respecto a si seremos capaces de llegar puntuales a esta cita con la historia. La transformación de la economía que ha planteado el presidente demócrata de los EU al mundo, no debe resultarle ajena a México, por razones geográficas y comerciales debemos ser actores estelares de esta transformación.
Después de este 6 de junio, independientemente de las mayorías y minorías que resulten, nuestro país deberá entender el espíritu de la transformación del pueblo norteamericano. Este es el entorno de la celebración del d
Día del Trabajo 2021 a un año de pandemia del covid-19.
«Crear nuevos empleos bien remunerados, rediseñar la semana laboral, establecer horarios escalonados de entradas al trabajo, garantizar la sana distancia en el transporte colectivo, regresar a clases con un modelo educativo semivirtual y con todas las precauciones habidas y por haber, crear un sistema profesional de acompañamiento geriátrico en asilos o a domicilio, ofrecer video consultas médicas, consolidar la campaña nacional de vacunación, son, entre otras medidas, la precondición para lograr aprovechar al máximo la reactivación económica de los Estados Unidos y que no nos pase de noche», comentó Rivera.
La suma de todos estos esfuerzos establece la materia de responsabilidades pendientes del actual gobierno federal, tarea nada menor. La Sria. Del Trabajo brilla por su ausencia en estos momentos tan cruciales. El programa de becarios a todas luces resulta ser un programa fallido y los aumentos al salario mínimo, por si mismos, no hicieron diferencia alguna. Se debe poner en marcha una estrategia integral de reactivación del mundo del trabajo y económico del país.