MEXICALI, SEPTIEMBRE 17, 2021.- Una inversión de 6,4 millones de pesos de Gobierno del Estado, Universidad Autónoma de Baja California (UABC) y asociaciones de cerveceros artesanales, se aplicará en una planta experimental de malta, afirmó el Secretario de Economía Sustentable y Turismo (SEST), Mario Escobedo Carignan.
Indicó que el plan busca reconvertir el cultivo de trigo en el Valle de Mexicali, generando mayores beneficios para los productores.
La planta experimental de malta se construirá sobre 184 metros cuadrados, con capacidad para procesar una tonelada diaria, y estará ubicada en el Ejido Nuevo León, con el fin de atender las necesidades de los productores de cerveza artesanal.
Dentro de los objetivos principales está la reconversión productiva del trigo en el Valle de Mexicali, por variedades que generen mayor valor agregado, ya que históricamente el valor del trigo ha generado pérdidas a los agricultores.
Con la planta maltera se busca fortalecer el desarrollo agroindustrial del Estado, impulsando la innovación tecnológica y la sustitución de importaciones, en beneficio de la creciente industria de la cerveza artesanal.
Escobedo Carignan destacó que Baja California es el Estado con mayor consumo de cerveza en América Latina, y con más cerveceras artesanales del país, sumando 195 empresas registradas.
Señaló que aquí se producen 108 mil hectolitros, lo que representa el 7% de la producción nacional, habiendo logrado primeros lugares en medallas y reconocimientos nacionales e internacionales.
En cuanto a los indicadores de impacto en la agricultura, precisó que se desea aumentar la rentabilidad agrícola, reducir las importaciones de malta, e incrementar la productividad de cerveza artesanal.
De igual forma, se pretenden desarrollar procesos de producción con calidad y características estandarizadas de la malta de Baja Californiana, además de desarrollar recursos humanos especializados en la industria cervecera.
Sostuvo que el trigo genera un ingreso por hectárea de 32 mil pesos, a un costo de 30 mil pesos, a diferencia de la cebada, que atrae ganancias por 33 mil pesos por hectárea, a un costo de 25 mil pesos, lo que hace una diferencia de dos mil pesos para el trigo, y ocho mil pesos para la cebada.