TIJUANA, ENERO 22, 2021/DTJ.- Agoniza el Sistema Integral del Transporte de Tijuana SITT, y con él, muere el intento por ordenar el transporte en una ciudad ahogada por intereses económicos y políticos que en nada benefician a sus habitantes.
Para el transportista Arturo «Napo» Aguirre, es tal la emergencia que el SITT debe salir de la esfera municipal pasar urgentemente al estado a fin de rescatar el proyecto que sería la columna vertebral del transporte en esta ciudad fronteriza.
«Lo dejaron morir» dijo el representante de la empresa Grupo Calfia, la más grande de la ciudad que, por cierto participaría con capital y sus rutas para alimentar esta idea, que muchos otros siguen intentando asfixiar.
Recordó que las operaciones del SITT inician bajo la administración del Doctor Jorge Astiazarán Orcí cuando con mucho esfuerzo se logró convencer a los transportistas de integrarse al proyecto.
Acusó a la siguiente administración de PAN encabezada por Juan Manuel Gastelum de obstaculizar el proyecto, dejar que lo vandalizaran y «patear el bote» a fin de que el SITT se hundiera sin alimentación de pasajeros y severas restricciones.
Recordó que se hicieron fuertes inversiones por más de mil 200 millones de pesos para adecuar la infraestructura, construir las estaciones, carriles confinados, puentes, colocación de semáforos, separar un carril y marcarlo para su identificación y uso exclusivo del autobús colectivo, hacer las oficinas en tanto los transportistas invirtieron unos 400 millones de pesos en la compra de los camiones. El sistema de recaudo también invirtió en equipo, cámaras, computadoras, alcancías, máquinas torniquetes una cifra superior al millón de dólares.
Muchas de estas adquisiciones terminaron vandalizadas o robadas.
Arturo Aguirre afirmó que en la actual administración, bajo la transición del transporte de los municipios al Estado, hay esperanza en retomar el proyecto que quedó en el olvido para retomar el camino ya avanzado y proteger la inversión de la federación, municipio y empresas transportistas particulares.
«ha sido un éxito el que se haya ido el transporte al Estado puesto que ya está gozando de una estructura mucho mayor, nada menos que lo que merece el sistema de movilidad en todo el estado por lo que estamos esperando que el SITT pase al gobierno de Baja California», recalcó.
En este momento el SITT transita semi vacío con lo que se han tenido que retirar camiones que tienen que ser pagados, pero ante la imposibilidad de ser rentables en el sistema integral, han tenido que incorporare al inventario de las empresas pues este no es autosustentable, ni deja recursos para hacer frente a los grandes compromisos derivados del préstamo para adquirir estas unidades.
Por lo pronto hay un presupuesto de 40 millones de pesos que asignado para el organismo estatal por lo que se tiene la esperanza de que al pasar al Estado, se reactiven las operaciones y más empresarios puedan o decidan participar de un SITT renovado.