PLAYAS DE ROSARITO, NOVIEMBRE 7, 2021/DTJ.- Pocas veces nos detenemos a reflexionar respecto a la labor de los bomberos de Playas de Rosarito y se nos hace normal el decir o contar que sofocaron un siniestro más. Pero en la historia de hoy, debemos considerar que hay bomberos en potencia, en los vecinos solidarios a un siniestro, que actúan con decisión cada vez que hay un incendio.
Hoy debemos reconocer la valentía, el arrojo y la inteligencia de los vecinos que aunado a la actuación de los bomberos de Rosarito intervinieron anoche ante el incendio de un sillón de dos metros de largo que puso en peligro a los residentes de una vivienda de manera y amenazaba con extenderse.
La Central de Radio despachó las unidades con destino a la Colonia Agua Marina para que justo en la Calle Coral arribaran las máquinas M-62 y U-56 para atender la emergencia.
Los héroes anónimos, la población rosaritense se armó de valor para adelantarse al arribo de los tragahumo y se pusieron a arrojar agua al interior de una casa de madera de unos cinco metros de frete por 6 de fondo para atender la emergencia. El incendio ya había afectado una pared y le techo.
Al llegar, los bomberos notaron que los vecinos habían logrado controlar el incendio, pero intervinieron pues cualquier braza podría reanimar las llamas.
Igualmente ventilaron el lugar para evitar intoxicación por inhalación de humo.
Una vez más, los residentes de Rosarito, dan una muestra de que pueden trabajar en coordinación de sus autoridades.
EL CONTRASTE
A diferencia del anterior incendio donde colaboró la comunidad, los bomberos acudieron a atender un incendio de basura. Este, se extendía en unos 8 metros cuadrados.
El motivo: un vecino que se encontraba quemando basura en un terreno baldío.
La autoridad dio instrucciones y recomendó a la persona no incendiar la basura pues genera contaminación al medio ambiente.
El siniestro fue sofocado por el vecino, por sus propios medios.
La recomendación de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Rosarito es tener cuidado con el manejo de velas, veladoras o cualquier otro combustible, pues pueden derivar en incendios de casa habitación, con la posibilidad de resultar lesionado o incluso perder la vida.