CIUDAD DE MÉXICO, DICIEMBRE 27, 2023.- Este próximo 6 de enero de 2024 los consumidores inauguran el calvario que cada inicio de año les toca sufrir, la cuesta de enero, que ha dejado de serlo para convertirse en una verdadera pendiente, ya no de enero sino del primer trimestre del año, y que para sortearla al tiempo los consumidores se han vuelto alpinistas profesionales, haciendo todo tipo de peripecias para salir con los gastos.
Dirigiendo la mirada al tema de la celebración de los Reyes Magos, la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) realizó un estudio de mercado para establecer la variación de precios que hay en los distintos productos que se demandan en este festejo.
En cuanto a las roscas, se establecieron dos categorías: la rosca tradicional y la rosca gourmet, así como dos tamaños: chica (5-8 personas) y grande (12-15 personas); también se puso el lente en tres canales de comercialización: panadería de barrio, supermercado y panaderías de franquicia, arrojando lo siguientes precios:
La rosca tradicional de tamaño chico la podemos encontrar en la panadería de barrio hasta en $200.00; en el supermercado hasta en $230.00 y en la panadería de franquicia hasta en $310.00; mientras que los precios de la rosca tamaño grande pueden llegar hasta $400.00, $469.00 y $515.00, respectivamente.
También se encontró en el mercado las roscas gourmet con ingredientes, rellenos y presentaciones novedosas. En un tamaño chico se pueden conseguir por hasta $235.00 en panaderías de colonia; hasta $379.00 en un supermercado y hasta en $495.00 en una panadería de franquicia; en tanto, la rosca grande llega hasta $450.00, $569.00 y $725.00, en el orden antes señalado de los distintos canales.
Por su parte el chocolate, pareja inseparable de la rosca de Reyes, para aproximadamente quince personas, podrá llegar a costar hasta $222.00, considerando unos cinco litros de leche.
Con la rosca y el chocolate no acaba la cosa, pues por la huella religiosa en nuestro país, los Reyes Magos tienen mayor presencia que el propio Santa Claus, de forma tal que en el México profundo, el más poblado, son los Reyes Magos los garantes de regalar juguetes a los niños. Con ello se incrementa el gasto de esta celebración. En un hogar al menos hay dos hijos menores a los que hay que regalar y en ese par de juguetes los papás gastarán al menos $915.00 comprando juguetes promedio de marca, lo que indica un aumento de 52.5% con respecto al año anterior.
Esto explica con toda nitidez la afirmación de que este 6 de enero de 2024, para celebrar la llegada de los Reyes Magos al hogar con rosca y chocolate, los mexicanos deberán gastar al menos $622.00 y, si hay que comprar regalos, se incrementa a al menos $1,537.00, sudando la gota gorda para hacerlo. Estos datos suponen un encarecimiento de 23% en el primer caso y de 39% en el segundo con relación al festejo de 2023.
“Este aumento se explica por la embestida inflacionaria que ha sufrido la industria de la panificación en el costo del trigo y el azúcar, el factor energético, el salarial y los costos de logística, producto de la inseguridad carretera y urbana a la hora del suministro de mercancías, sin resultar ajenas a estos golpes la industria de los lácteos y el chocolate”, explicó Cuauhtémoc Rivera, presidente de ANPEC.
Respecto al mundo de los juguetes, dos de cada diez que se venden en México son de contrabando o robados. El flagelo del contrabando y la piratería que inunda al mercado nacional de los popularmente conocidos como juguetes chinos y los juguetes calientes, producto de los asaltos carreteros, propinan un duro golpe al mercado legal, estableciendo una diferencia de precio entre uno y otro de hasta un 56.51%. Aun así el sector tuvo ingresos aproximados de 4,560 millones de dólares en el 2022, cifra que todavía no alcanza el monto de venta precovid.
“Debemos recordar que los juguetes chinos no pagan impuestos, financian la actividad delincuencial, no tienen durabilidad y poseen menos calidad. Lo más delicado de todo es que ponen en riesgo la salud de los niños al utilizarse sustancias tóxicas en sus pinturas. A pesar de este entorno encarecido, los niños ya escribieron la carta a los Reyes Magos y las familias mexicanas se reunirán a partir la rosca con un chocolatito caliente. Todo está listo para saber a quiénes les tocara el monito y se verán comprometidos a poner los tamales el 2 de febrero, Día de la Candelaria, última parada de este maratón pleno de glotonería y gusto al paladar”, concluyó Rivera.