TIJUANA, ENERO 25, 2024.- Padres de familia del Colegio Bilingüe del Rey, una de las dos escuelas de Valle del Alamar que resultaron inundadas con las lluvias del lunes pasado, solicitaron que las autoridades construyan las obras de infraestructura necesarias y suspendan clases ante cualquier evento climático de riesgo, luego de que 50 alumnos junto con sus maestros tuvieron que ser evacuados y llevados a la delegación Centenario.
Arely Alcántar Soto y Fermín Castillo Lara, padres de familia del colegio, criticaron que contrario a otras ocasiones en que caen ligeras lloviznas, o incluso el pronóstico falla y no llueve, suspenden clases y esta vez lo hicieron a destiempo, solo para el turno vespertino cuando la tormenta ocurrió por la mañana, “y cómodamente dejaron la decisión en los papás de llevar o no a la escuela a sus hijos en días de lluvia”.
Asimismo pidieron obras de infraestructura pluvial que resuelvan el problema, pues solo se hizo un canal de tierra que desfoga los escurrimientos hacia la canalización de río Alamar pero es insuficiente, “y vienen nuevas lluvias y el riesgo de nuevas inundaciones que pondrán en peligro a los 450 alumnos de prescolar, primaria, secundaria y preparatoria con que cuenta la escuela”.
Junto con directivos del Colegio Bilingüe del Rey, encabezados por las directoras María Luisa Layón y Brenda Robles, Arely Alcántar y Fermín Castillo explicaron que el problema deriva de la construcción de Nodo Alamar, desde hace poco más de un año, obra que obligó a abrir una calle de terracería que anteriormente era privada, para incorporar a circulación vehicular de bulevar Terán Terán hacia la vía rápida del Alamar.
Esto aunado a obras de nivelado de un terreno aledaño, en pleno Cañón Del Padre, que incluye el rebaje de un cerro, provocó un alud de agua y tierra que inundó algunas maquiladoras y los colegios Bilingüe del Rey y Alamar, la mañana de lunes pasado, lo que obligó a evacuar a maestros y 50 alumnos que fueron sacados en patrullas policiacas y unidades de Protección Civil y llevados a la delegación Centenario, donde más tarde los recogieron sus padres.
Los padres de familia se quejaron de la falta de planeación en la ciudad, lo que lleva a hacer obras sin considerar los daños colaterales que se pudieran generar y que, como en este caso, afectan los derechos fundamentales como lo es el de la educación, para un sector tan vulnerable: los niños.