TIJUANA, DICIEMBRE 10, 2022. Por incumplimiento en los permisos correspondientes y una serie de irregularidades detectadas en el inmueble, como falta de seguridad e higiene, una guardería de la colonia Angélica, en la delegación La Mesa, fue clausurada por la Dirección de Inspección y Verificación del XXIV Ayuntamiento de Tijuana.
Por instrucciones de la alcaldesa Montserrat Caballero Ramírez y bajo la supervisión del secretario de Gobierno Municipal, Jesús García Castro, inspectores hicieron una revisión del establecimiento y debido a las malas condiciones, se levantó un acta administrativa y procedió a la clausura inmediata por el riesgo que implicaba para los menores.
La guardería “Rincón Infantil” funcionaba con una licencia de operación para jardín de niños con un horario hasta la 1:00 de la tarde; sin embargo, el lugar mantenía sus servicios hasta la noche, atendiendo a menores por debajo de la edad permitida, incumpliendo así con el Reglamento de Centros de Atención, Cuidado y Desarrollo Integral Infantil para el Municipio de Tijuana, entre otra normatividad infringida.
El área de juegos infantiles carecía de medidas de seguridad, había fisuras en el pavimento del patio exterior, el mobiliario estaba en mal estado, un columpio utilizado por los menores estaba en riesgo de colapso, lo mismo que un tinaco propenso a caer justo en esta zona.
El techo de los sanitarios utilizados por las niñas y niños presentaba malas condiciones y riesgo de caída de un yeso en el techo, infraestructura descuidada y con mala higiene; también la cocina presentaba mala higiene y no había nada que impidiera el acceso a los menores, pese al riesgo que representa para ellos.
Uno de los salones no tenía extintores, detectores de humo, rutas de evacuación ni protectores en la toma de corriente; en el segundo salón había un centro de carga de alto voltaje justo arriba de una cuna tipo corral, con un menor dormitando al momento de la inspección, y cielos y muros en malas condiciones.
En el tercer salón o casa de la guardería se detectaron fisuras en las paredes producto de la humedad, mal estado de las instalaciones, así como ausencia de extintor, luces de emergencia, señalética y detectores de humo.
Por estas causas, se procedió a la clausura inmediata del establecimiento y contactó a los padres de familia para que acudieran por los menores de edad, quienes se encontraban en riesgo por las condiciones del lugar y apenas dos supervisoras a cargo de los mismos.Con este tipo de acciones, el Ayuntamiento de Tijuana reitera su compromiso con el bienestar de las familias, además de hacer un llamado a estos giros para cumplir con la normatividad, privilegiando siempre el interés superior de la niñez.