CDMX, MARZO 2, 2024.- El tránsito del primer cuadro de la Ciudad de México quedó materialmente estrangulado. Miles de motores de los camiones de transporte foráneo que trasladaron a cientos de miles de personas al zócalo capitalino perfumaron de humo de diésel las céntricas calles de Reforma e Insurgentes donde se concentraron para esperar a los que participarían en el mega arranque de campaña de Morena-PT y Partido Verde Ecologista de México.
Ayer se echó toda la carne al asador, fue el momento crucial para el proyecto de Andres Manuel López Obrador conocido como la 4ta Transformación de México. El momento de sostener (es más fácil llegar que mantenerse) el poder político en México mientras la carrera política de AMLO se eclipsa, o al menos, eso nos quiere hacer creer.
Llegaron de todos los rincones de México, en una organización muy bien aprendida al padre de todos los partidos políticos en México (el PRI) un acto calificado de ACARREO por la oposición, ORGANIZACIÓN POLÍTICA, por parte de los seguidores de este movimiento.
Pero la verdad sea dicha: los rostros de hoy, en el zócalo de la Ciudad de México, las intenciones de la gente de hoy: MUCHO se parece al gesto de los que ayer formaron parte de una misma forma de manifestar su adhesión a una candidata invencible, ”y a ver que nos toca”.
Por eso cientos de miles se reunieron hoy para escuchar a Claudia Sheinbaum, para sentirse dentro de ese grupo GANADOR de la política contemporánea y justificar con un “esta si es la buena” lo que algún día criticaron desde la oposición.
Para mi fortuna, llegué a la Ciudad de México cuando todo se había terminado. Muchos regresaban a su camión. Los pesados vehículos, algunos impecables, ya regresaban a la estrangulada circulación de los ejes viales y otros más a la cotidiana faena de librar la embestida de los reyes de las carreteras que con solo aventar el camión paraban la intención de los autos pequeños por avanzar.
Estando en Reforma, desde lo alto de un edificio observaba a muchas personas, mujeres, hombres de la tercera edad, regresar al camión. No vi policía dirigiendo el tránsito, esa escena era una representación vil de sálvese el que pueda.
Entonces pensé que no había llegado cuando todo había terminado. Tal vez sí, el mitin en el cual un criticado resbalón de la Doctora en su discurso fue la comidilla de la oposición, que ya le urge regresar a Los Pinos. Ese resbalón de “…que siga la corrup…. La TRANSFORMACIÓN” Me recordó que en nuestro país ha reinado esa forma de vivir y que el reto es efectivamente superar esta manera, no solo de ver la vida, sino de actuar en TODOS los niveles.
Entonces no llegué al final, sino al principio de una campaña que representa los estertores del país por parir una forma de gobierno (obvio, no PERFECTA) pero que realmente responda a las necesidades que tenemos en nuestro querido México.
Desde aquí, sin proponérmelo, fui testigo de una ambición por el poder político, como antes; de un sectarismo político, como antes; una candidata con la mesa servida, como antes; un grupo de personas con fe en sus colores, como antes; un proceso político que muestra músculo, como antes; una sociedad que espero no sea como antes pues ya ve usted, estimado lector, como nos fue a México en los últimos años que, precisamente por eso, vimos surgir un “necio” Andrés Manuel (cómo él mismo se califica) que se aferró a la oposición y logró llegar al poder supremo del país, porque los políticos que estaban creían que el pueblo-borrego iba a aguantar otros 70 años de opresión, engaños y manipulación social.
Por la madrugada, se escuchaba una música de antro en el patio de una casa habilitada con foquitos como techo mientras se adentraba, con un grupo de jóvenes, inmersos en los vapores del alcohol, que no se fueron hasta entradas las 5:00 de la mañana.
Justo enfrente, de ellos un edificio de puro metal. Igualmente, trabajadores entre la oscuridad laboraron toda la noche soldando la estructura. Ah! Qué contrastante es la Ciudad de México, y yo que no me podía dormir.